OIX - BEGET: DESCUBRIENDO NUEVAS RUTAS

En España amaneció antes de lo habitual para la expedición de la grupeta a la recóndita ruta de Oix. Todavía sin visibilidad se dieron ruta Isaías, Roberto y Alberto en el punto de partida habitual de las grandes citas, el Ayuntamiento de Esplugues.

Rápido desplazamiento hasta Ripoll, sin apenas tráfico, y parada en el no menos tradicional aparcamiento del parque. El tiempo, aunque algo nublado, no amenazaba lluvia.


Como manda la tradición, en primer lugar tomamos el café y las pastas, antes de emprender la ruta.

¿Café Cervélo?

Iniciamos la ruta hacia Sant Joan de les Abadeses por la antigua vía del ferrocarril, hoy adapatada para circular en bicicleta.

Pista más propia de las clásicas ardenesas

Sin más, iniciamos en franca armonía el ascenso al primero de los puertos de la jornada, Coll de
Santigosa. La temperatuda era agradable y el ritmo vivo, así que coronamos con rapidez.


Rápido descenso hacia Olot, recordando el reciente paso con ocasión de la Terra de Remences. El tráfico brillaba por su ausencia. Enseguida emprendemos ruta hacia Castellfollit de la Roca, pueblo de singular belleza por su ubicación.


Sin respiro, tomamos el desvío hacia Oix, donde se inicia el ascenso del segundo puerto, el Coll de Camporiol, de pendiente bastante suave. Enseguida llegamos al inicio del punto álgido de la jornada, el pueblo de Oix. Justo a la salida del mismo se inicia el Coll de Bucs, 4 Kms de pendiente sostenida oscilante entre el 9% y el 10%.



Los tres integrantes no rompen la formación, aunque empiezan a emplearse a fondoen algunos tramos realmente duros.

Isaías estuvo inconmensurable durante toda la ruta.

Roberto superó con solvencia la dureza de estas rampas

Una vez coronado, se inicia un largo descenso hasta el incomparable pueblo (?) de Beget, por una carretera realmente estrecha, aunque no peligrosa. Breve parada para reponer líquidos...

... y a por la cuarta dificultad del día, el Coll de Boixeda, el de mayor longitud (11 Kms.) y pendiente más sostenida. Los kilómetros pasaban pero la grupeta mantenía un buen ritmo.


Tras alcanzar la cima, hay un breve descenso hasta llegar al cruce del Coll d'Ares que lleva a Camprodón. Pasado este pueblo se encontraba el desvío que nos había de llevar hasta Ogassa. Llegado a este punto, un cartel anunciaba que la carretera estaba cortada por desprendimientos, por lo que decidimos seguir rectos hasta Sant Joan de les Abadesses y subir desde allí a dicho lugar. Y fue en este tramo donde Isaías inició una exhibición de fuerza que nos hizo rodar por encima de los 45 Kms. hora en algunos tramos, y eso que el aire empezaba a soplar de cara. Llegados a Sant Joan, ya con las fuerzas algo mermadas, decidimos emprender la subida a Ogassa, breve e irregular, de 4Kms de longitud y con alguna rampa nada despreciable.

La fatiga ya patente y un molesto dolor de rodilla de Isaías aconsejaron a la grupeta a volver desde Sant Joan hasta Ripoll por la misma "vía verde". En esta ocasión, jalonada de innumerables transehúntes...

En resumen, 121 Kms. de salida y una ruta muy interesante que ha dejado a los miembros asistentes, preparados para el siguiente reto: Col de Lers