Crónica de la salida 14-02-2010

En España ha vuelto a amanecer y la grupeta Hospisport ha demostrado un Domingo más que ni siquiera un tiempo inclemente como el de hoy es capaz de derrotar a este grupo de aguerridos cicloturistas. Y es que ¡la grupeta no se rinde!, como si de defeneder el "alcázar cicloturista" se tratase. Domingo tras Domingo la grupeta se mantiene fiel a su cita y no ha habido ni uno sólo desde principio de Noviembre en el que al menos tres de sus miembros no hayan salido.

Hoy de la partida sólo 3 han desafiado al tiempo: La clase, el Abuelo Poci y Alberto Flandrien; sin duda los más necesitados de kilómetros. La élite estaba por otros menesteres, unos profesionales (Capitano), otros ociosos (Grimpeur, ¿te ha asustado el tiempo?), y otros, como el Doctor X... por ocultos motivos. Tampoco ha sido de la partida Paco "Lance" López. ¿Habrá ido de nuevo a hacer un entreno de calidad? Seguro que la semana que viene nos sacará de dudas.

Tras valorar la conveniencia de realizar la salida, nos ponemos en marcha rumbo a la autovía, con los primeros copos de nieve acariciándonos lo poco que de nuestra piel asomaba bajo la indumentaria reglamentaria. Dudas por la autovía hasta que se divisó en el horizonte una franja luminosa que adiviniaba que una climatología más benigna nos esperaba allende las Costas.

El ritmo no era muy alto: el abuelo Poci aquejado de un catarro mal curado, Roberto la Clase en plena progresión y el Flandrien con no muy buenas sensaciones, han llevado un verdadero trote cochinero hasta el pie de costas. La nieve, en muy pequeña cantidad, nos ha acompañado, en mayor o menor medida hasta el pie de costas. Las costas se han pasado al mismo ritmo, aunque el Flandrien del grupo no ha podido acompañar a sus dos compañeros y se ha descolgado pasada la Maladoneta. Vendrán domingos mejores.

Llegada a Sitges y definición de la ruta: no hay muchas ganas de hacer grandes cosas hoy, así que nos decidimos por la ruta Vilanova-Casino-Sant Pere de Ribes. El recorrido se efectúa en agradable harmonía y con un cielo más despejado y ya nada amenazador. Cafelito reparador en nuestro Bus Café, o "China corner", donde felicitamos protocolariamente a nuestra amable camarera oriental por el año nuevo que están celebrando.

De vuelta la sensación de frío se hace más intensa, así que nada mejor que emprender las costas con un ritmo vivo. Cuando encaramos la Maladona un espontáneo se une al grupo para marcar un ritmo que hace subir las pulsaciones del Abuelo Poci y de Flandrien. La clase sigue su progresión y corona no lejos del terceto. La bajada, todavía mojada se hace con calma. Una media un poco vergonzante espoletea al terceto para marcar un ritmo elevado por la autovía, cosa que se consigue hasta llegar al aeropuerto donde, coincidiendo con la entrada de viento frontal, aflojamos el ritmo y rodamos en franca harmonia hasta llegar a Bellvitge.

En definitiva, un domingo ganado que nos ha servido para seguir progresando tranquilamente de cara a las citas venideras.

Kms: 105
Media: 26,5 km/hora
Pulsaciones: no registradas, nos movemos por sensaciones